Algunas xilografías reflejan el propósito del libro; el ejemplo más claro de esta función es la imagen de un maestro impartiendo lección a sus alumos en la portada que funciona como un símbolo de una tpolgía concreta, el manual escolar. A esta representación, se la conoce como accipies a partir de la denominación hecha por Proctor, basada en la leyenda que aparece en la filacteria o banderola de uno de estos grabados: ic00897000
Heinrich Quentell usó distintas variantes de este grabado en más de cien ediciones diferentes y casi todas las dispuso junto al título. Se han identificado al menos cinco modelos distintos de accipies.
En este manual de lógica medieval aparece bajo el título la imagen de Santo Tomás de Aquino en compañía de cuatro discípulos. La leyenda, S[an]c[t]us Thomas cu[m] discipulis suis, inserta en la imagen, está compuesta tipográficamente, lo que permitía la modificación del texto o su recambio, ampliando asi las posibilidades de uso del taco xilgráfico.
El funcionamiento independiente de los grabados xilográficos acabó desvinculándolos del contenido de las obras hasta derivar en un uso meramente decorativo.
En estos ejemplos, ajenos a la colección de la Real Biblioteca, podemos ver el uso diverso que Quentell hace de esta xilografía
Sin texto:
Con otro texto: "Ioannes de Garlandia cu[m] discipul[is] suis":
En este impreso italiano, la orla que rodea al texto en la primera hoja indica su uso escolar. El maestro está representado en la inicial; en la parte inferior de la orla se suceden diversa escenas escolares: el proceso de copia de un libro manuscrito, un aparente castigo corporal o un maestro con un grupo de alumnos...