En 1992 los herederos de Justus Perthes recuperaron su derecho a utilizar el título original de Almanach de Gotha en la continuidad de la publicación. Lo hicieron por tiempo breve porque en 1998, John Kennedy, un editor establecido en Londres, compró los derechos del título inaugural y retomó la publicación de la serie pero en lengua inglesa, la nueva lingua franca de la diplomacia que había desbancado al francés. El éxito de la empresa, cuyo aspecto formal y la calidad de impresión no rivalizaban con la tradición de la serie, no fue el esperado.
El último intento de redimir el Gotha corresponde a la casa editorial italiana Ettore Gallelli. En marzo de 2022 publicó el Calendario di Gotha, una versión que procura recuperar las señas de identidad del almanaque original, perdidas o desdibujadas en los sucesivos intentos editoriales del siglo XXI, recuperando la calidad del papel y la estructura temática del modelo: un detallado directorio de las dinastías reinantes, o que un día lo fueron, y toda la alta nobleza asociada a los linajes más distinguidos.
El Gotha en la Real Biblioteca
El volumen más antiguo del Gotha conservado en la Real Biblioteca corresponde al año de 1776. Algunas faltas en la continuidad de la serie revelan que los convulsos acontecimientos históricos y políticos que afectaron a España y a Europa dejaron también su huella en los ingresos de libros en este depósito. Es el caso del bienio 1930-1931 o de intervalos más extensos, como el que ilustra la falta del Almanach de Gotha entre 1934 y 1938 o entre 1940 y 1944, con la excepción de la entrega correspondiente a 1942, la última que ingresó en la Biblioteca.